Día 59.- Entre las espinas de Sonora
Hoy seguimos en el Estado Mexicano de Sonora y os traemos un par de especies muy representativas de este lugar del mundo tan especial en cuanto a cactaceas, pues todos los lugares del mundo tienen algo especial y único, pero este es sin duda el paraíso de los cactus y muchas otras suculentas.
El primero que os presentamos es el Lophocereus schottii, esta especie tienen un territorio muy amplio de distribución desde el estado de Nuevo México, Arizona, Sonora hasta Baja California, y por sus originales y extrañas formas forma parte de la mayoría de jardines de cactus del mundo. Este cactus, también conocido como Sina barbona o sinita, crece en las zonas desérticas de ramblas y suelos arenosos de los Estados nombrados, crecen ramificados desde la base y llegan a medir hasta seis metros, formando paisajes arbustivos muy característicos.
Los indios Seris consumían el fruto globoso parecido a un higo chumbo pero más pequeño, y colgaban en sus tallos amuletos y ofrendas, pues creían en la buena energía de esta planta, aunque procuran no hablar delante de ella, pues afirman que puede oír las conversaciones. Esta especie se ha usado desde tiempos ancestrales como remedio para numerosas dolencias y se están estudiando sus efectos en tratamientos contra el cáncer.
Existen numerosas variaciones con formas monstruosas muy llamativas y comerciales. Esta especie aguanta varios grados bajo cero.
El siguiente género que os traemos es el de las opuntias, pues en este territorio existen numerosas especies y que a pesar de su terrible cubierta de espinas han servido de alimento y desarrollo para numerosas culturas nativas. Una de estas especies es la Opuntia bigelowi o choya güera, es una opuntia que llega a alcanzar porte arbóreo y está totalmente recubierta de fuertes espinas amarillentas, su distribución natural es desde el suroeste de Arizona hasta toda la costa del Golfo de California. Los indios Seris, que son los principales habitantes de ese territorio costero, consumían los tallos tiernos después de cocerlos, o tatemarlos como dicen en México, también usaban el corazón de la raíz como diurético.
Dos especies para xerojardines y paisajes desérticos.
Un saludo y feliz día.
Hay diferentes variedades de Lophocereus con portes llamados monstruosos o crestados llegando tener formas muy inverosímiles.
Los extremos del Lophocereus están cubiertos por espinas finas formando un especie de pelo grueso que le protege del frío y de la insolación.
Lophocereus schottii, también conocido como sinita es un cactus columnar de las zonas desérticas de Sonora, alcanza los 6 metros de altura muy ramificado desde la base formando extensas zonas arbustivas.
La Opuntia bigelowi servía como alimento a varias tribus costeras del Golfo de California, se consumían los tallos tiernos después de asarlos.
A este tipo de opuntia se le conoce como cholla y con el tiempo adquiere un porte arboreo.