Caléndula

Hay plantas que el ser humano lleva cultivando desde hace miles de años, la mayoría de veces por sus propiedades medicinales, o para alimentación. Hasta nuestros días han llegado las especies más resistentes y que han conseguido colonizar todo el mundo, y durante su camino se han ido llenando de cientos de relatos y leyendas.
Hoy os presentamos una de esas especies que nos ha acompañado a lo largo de la historia: hablamos de la vivaz caléndula, una planta que a pesar de su aparente fragilidad es tan resistente que en las zonas del Mediterráneo empieza a florecer al comienzo del invierno.
Los usos de esta planta radican sobre todo en las afecciones de la piel, picaduras quemazos, dermatitis…., sus principios activos se extraen sobre todo de las flores que junto a sus hojas también son comestibles.
Sus cuidados son muy sencillos, sustrato húmedo, pero no encharcado, orientadas al sol ya que al igual que los girasoles les encanta seguirlo con sus flores, y plantadas en tierra fértil así su fuerte tono naranja será mucho más intenso. Plantándola ahora y protegiéndola de las grandes heladas con hojas o paja tendremos una primavera de color y de múltiples usos. A esta planta también se le conoce con el nombre de maravilla, es pues una bonita forma de terminar y empezar el año; plantando maravillas.